Rambla de Albuñol
La rambla de Albuñol está situada en la vertiente sur de la Sierra de la Contraviesa. En la orografía de su comarca destacan sus ramblas, las más importantes de las cuales son las de Albuñol, Huarea y Aldahayar. Si bien éstas no nacen en cotas muy altas, debido su escasa distancia al mar sus cauces tienen pendientes muy pronunciadas, por lo que presentan una gran torrencialidad y, en consecuencia, son muy destructivas en el caso de lluvias intensas.
En el video siguiente puede apreciarse la violencia con que el agua discurre hacia el mar en el caso de riadas importantes tal como la que se muestra en el vídeo, que tuvo lugar el día 7 de Septiembre de 2015.
Tal como muestra la fotografía de la derecha, esta rambla discurre en una zona con gran densidad de invernaderos. Y muchos de los residuos producidos por éstos son arrojados o bien transportados por el viento a la rambla.
Las cuatro imágenes que siguen son fotografías tomadas en la rambla de Aldahayar y que figuran en el facebook de Carole Bow del día 28 de agosto de 2015. ¡10 días antes de la mencionada riada del 7 de septiembre de 2015!
Obviamente, en el caso de lluvias y riada todos estos residuos serán arrastrados hasta el mar, incluso bastante mar adentro.
Los residuos más pesados se asentarán sobre los fondos más próximos a la costa mientras que los que queden flotando o en la columna de agua se moverán impulsados por el viento o las corrientes hasta llegar a las playas o hundirse en fondos marinos más profundos.
Tal depósito masivo de residuos tiene un efecto devastador sobre la vida en dichos fondos. Así, los materiales orgánicos (cañaveras, troncos, ramas, etc.) entran en putrefacción, mientras que las láminas plásticas depositadas (plásticos de invernaderos, bolsas o envases de plástico,...) se constituyen en una barrera física que llega a asfixiar la vida en los fondos, provocando además la putrefacción de la materia orgánica.los mismos. Por otra parte las redecillas agrícolas son en trampas que dan lugar a pesca fatasma. Sin olvidar la contaminación producida por los restos de productos químicos presentes en los envases que se han abandonado o arrojado a las ramblas o barrancos.
Para los pescadores las riadas son hechos desastrosos. Los caladeros no solo quedan no aptos para la pesca durante un largo periodo de muchas semanas, sino que los objetos pesados tales como los troncos de los árboles rasgan sus redes, añadiéndoles un perjuicio más.
Es de destacar el hecho de que todo este daño causado por estos residuos a la vida marina y a los pescadores pasa inadvertida a la opinión pública. Tan visibles y noticiables como son las consecuencias de las riadas en tierra, en el mar y en los fondos marinos son invisibles. Una una vez pasada la tormenta, bajo la superficie del mar, pasan a no ser visibles y, por lo tanto, se ignoran o se olvidan con prontitud.
Las imágenes que siguen son muestra de los efectos en el mar de la riada del 7 de septiembre de 2015. Desde los innumerables residuos arrojados a las playas a las enormes cantidades de residuos plásticos agrícolas que en solo una mañana de faena llegan a recoger los pesqueros.
A menos de un año (10 meses) de que las lluvias y las riadas de principios de septiembre de 2015 "limpiaran" de residuos (la mayoría agricolas) las laderas de los montes y las ramblas costeras del levante granadino, cinco senderistas de la asociación Sierra Nevada Limpia recorrieron el día 10 de julio alrededor de un kilómetro de la rambla de Albuñol, en la proximidad de la pedanía de Los Castillas, localizando y retirando parte de los residuos allí existentes en ese momento (solo los de mayor volumen).
En una distancia tan reducida retiraron 50 sacos de todo tipo de residuos: plásticos de invernaderos (láminas, mallas, mallas tutoras,...), envases de productos para la agricultura (fitosanitarios, abonos, etc.), envases de comida (de bebidas y de alimentos), latas de cerveza, latas de atún, etc.
Para su sorpresa, cuando acabaron la recogida y se dispusieron a depositar los residuos en los contenedores adecuados, sólo encontraro uno, para residuos generales y a gran distancia.
Las imágenes que se muestran a continuación son testimonio de la acción realizada.
